A 15 años Juegos Panamericanos Santo Domingo 2003

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Los XIV Juegos Deportivos Panamericanos fueron inaugurados vistosamente en el Estadio Olímpico de la capital dominicana aquel 1 de agosto 2003 con la presencia del presidente del Comité Olímpico Internacional el belga Jacques Rogge, el presidente de la República Hipólito Mejía, el de la Odepa Mario Vázquez Raña, el presidente del Comité Olímpico Dominicano y del Comité Organizador el doctor José Joaquín Puello Herrera y demás autoridades olímpicas, federativas y estatales a nivel nacional e internacional.
El camino para llegar a este acto protocolar multidisciplinario fue largo y tortuoso pues tuvo la oposición del presidente de la Organización Deportiva Panamericana (ODEPA), Mario Vázquez Raña, y la parte interna desafecta a los mismos con quien en su momento fuera miembro del Comité Olímpico Internacional, Roque Napoleón Muñoz, ambos ya fallecidos. Aún así con el apoyo firme del presidente de turno, Hipólito Mejía, su Secretario de Deportes, Cesar Cedeño, y del doctor José Joaquín Puello Herrera en su condición de presidente del Comité Olímpico y del Comité Organizador, formaron un importante trípode que posibilitó la realización exitosa de unos juegos que fueron historia para América y el mundo.
No podemos dejar de lado la entrega y colaboración que aportó el entonces Secretario de Estado de Obras Publicas y Comunicaciones el ingeniero Miguel Vargas Maldonado para la ejecución de las obras de las instalaciones de competencias y la Villa Olímpica, entre otras edificaciones y facilidades.
El autor es dirigente deportivo y olímpico. Reside en Santo Domingo.
En el certamen atlético participaron 42 países, 5325 atletas en 31 deportes donde la República Dominicana logró el octavo lugar de la justa continental al sumar 41 medallas repartidas en 10 de oro, 12 de plata y 19 de bronce. A estos juegos le habían precedido los de Winnipeg en 1999 y la República Dominicana había obtenido la sede el 5 de diciembre 1998 en la ciudad de Panamá con la anuencia del presidente de turno el doctor Leonel Fernández Reyna lo que resultaba teóricamente contraproducente al tener en cuenta la devastación que dejó en el país el Huracán Georges el 22 de septiembre 1998.
La furibunda oposición de Mario Vázquez Raña a la sede y sus acciones posteriores para despojar a República Dominicana de la misma no surtieron el efecto por èl deseado relegando su candidatura favorita de Guadalajara para el 2011. En el intermedio Río de Janeiro acaparó la cita de 2007 estando como presidente del Comité Olímpico de Brasil, Arthur Nuzman, quien luchó en pareja con Mario Vázquez Raña en contra de Dominicana y la realización de este evento continental, sus acciones resultaron inútiles.
El doctor José Joaquín Puello transitó todo el camino como Presidente del Comité Organizador a pesar de los factores de complacencia política que intentaron despojarlo de la posición lo que el movimiento olímpico se opuso de manera tajante. Varios fueron los Directores Generales del más grande certamen atlético quedando finalmente el ingeniero Domingo Bienvenido Solano quien además era para la ocasión presidente de la Federación Dominicana de Boxeo, Fedoboxa.
El costo de los juegos se estimó inicialmente en 90 millones de dólares pero datos aún sin confirmar indican que la suma pudo llegar a los 150 y sobrepasando con creces el presupuesto inicial de los mismos. El legado olímpico de estos juegos para la República Dominicana está en que cada disciplina contó con instalación propia, la preparación de técnicos calificados en su respectivo deporte de manera especifica, el roce internacional al mas alto nivel con las autoridades olímpicas, la promoción del país y en especifico de la capital dominicana en el orden turístico sin dejar de lado que el país volvía a los primeros planos del deporte internacional luego de haber realizado los XV Juegos Centroamericanos y del Caribe, Santiago 86, entre otros.
El movimiento deportivo dominicano se viò asaltado de personas que pasaron a ocupar puestos gerenciales de primera categoría desplazando a esforzados y meritorios dirigentes nacionales bajo la premisa que posterior a la justa atlética incidirían de manera positiva en el desarrollo de algunas disciplinas; al día de hoy esa colaboración no ha llegado.
Aún así los juegos fueron exitosos en la organización y sumamente competitivos y lo más importante el que República pasó la prueba e ingresó a la élite de los países que realizaron unos Juegos Panamericanos.